Apuntes de noviembre
He estado leyendo el Discurso de mi vida, de Alonso de Contreras. El libro se escribió en once días en 1630 y en seguida se hizo famoso y se tradujo a varios idiomas. Me asombra descubrir que existen adaptaciones para niños. Las andanzas de Contreras comienzan a los doce o trece años, un día que va a ver unas corridas de toros junto al Puente de Segovia, cuando asesina por primera vez: «Saqué el cuchillo de las escribanías y eché al muchacho en el suelo, boca abajo, y comencé a dar con el cuchillejo. Y como me parecía no le hacía mal, le volví boca arriba y le di por las tripas, y diciendo todos los muchachos que le había muerto, me huí y a la noche me fui a mi casa como si no hubiera hecho nada».