Delatores
Crear PDF de este artículo. La acusación reverberó unos instantes en el aire y prosiguió luego su camino a través de la atmósfera mortecina de la Sala Segunda, donde se careaban rehuyéndose las miradas José Barrionuevo y Ricardo García Damborenea, hasta ser oída en el último rincón del recinto: delator. Al día siguiente los medios de comunicación desplegaban todos sus instrumentos hermenéuticos, actualizados por los interminables microanálisis de cada uno de los avatares del «caso Marey». La imputación de delatar, que implica la de revelar «alguna cosa oculta y por lo común reprochable» (Diccionario de la RAE), ¿no supondría el reconocimiento inconsciente de la culpabilidad de quien la emitió? ¿No estaría Barrionuevo descubriendo de ese modo que el presunto delator