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Manuel Arias Maldonado

La igualdad, desnudada por sus solteros (y II)

¿Capitalismo, año cero? Tal es la pregunta que formulábamos al final de la primera parte de este post, que aprovechaba las recentísimas críticas…

La igualdad, desnudada por sus solteros (I)

Nada mejor que empezar una rentrée con un toque afrancesado. Y pocas cosas más francesas que la preocupación por la igualdad entre los ciudadanos,…

Literatura y totalitarismo (y II)

No diga verano, diga novela de más de seiscientas páginas. Y en ésas estamos, comparando dos obras monumentales que comparten tema –la…

Literatura y totalitarismo (I)

Ninguna época como el verano para las grandes empresas lectoras, solemos decir, olvidando que ninguna otra temporada establece una relación más discrepante…

Manufacturas de la virtud

¿Tiene usted algo que objetar a una campaña pública dirigida a disminuir el consumo infantil de bollería industrial o a prevenir el…

Paradoja del vampiro (y II)

Basta echar un vistazo a las manifestaciones de la cultura popular contemporánea para comprobar la sobresaliente vigencia del mito vampírico. Pero ese…

Paradoja del vampiro (I)

A estas alturas, no parece necesario insistir en la importancia que tienen los mitos dentro de una cultura, ni subrayar la potencia…

Que se mueran los feos

Ha llegado el verano y con él, como siempre, la apoteosis de la forma. Ya lo decía Witold Gombrowicz, obsesionado con ella:…

Fútbol es (sólo) fútbol

Ha empezado la Copa del Mundo de fútbol –antes, hermosamente, balompié– y ya no se habla de otra cosa. ¡Ni siquiera en…

Los adversativos (y II)

¿Qué relación hay entre radicalismo político y felicidad? Podría pensarse que los radicales, los indignados, son más infelices que quienes están satisfechos…

Los adversativos (I)

¿Contra Franco se vivía mejor? Naturalmente. Porque, de hecho, siempre se vive mejor contra algo: ya se trate de Franco, los inmigrantes…

La revolución de la normalidad

Tuve un amigo que era todo un profesional de la extravagancia, y a mí, que encontraba algo forzadas muchas de sus performances cotidianas, me…