Sombras y asombros de la impostura
En la portada del último libro de Ray Loriga, Trífero, aparece una imagen de Gary Cooper –fotografiado por Robert Capa– haciendo equilibrios sobre el tronco de árbol que cruza un riachuelo. A su figura elegante y ridícula –tal y como la califica el autor– se parece la del protagonista de la novela, un impostor –siempre a punto de pisar en falso– que se hace pasar por experto en física cuántica y adquiere un dudoso renombre postulando mundos paralelos y «universos sombra»; con estos imaginativos supuestos científicos el personaje da un vuelco a su vida y el autor se lo da a la trayectoria de su obra: en su anterior novela –Tokio ya no nos quiere–, Loriga abría la vena de