Carlos Rodríguez Braun
Sir Alan Peacock gusta de autodefinirse como «economista político», en el sentido de que se ocupa de cuestiones tanto teóricas como prácticas. Es un liberal enemigo de los ultraliberales, los dogmáticos que jamás se preocupan de cómo se liberaliza en el mundo concreto, y que siempre se refugian en principios generales que impiden formular diagnóstico alguno sobre la realidad. De ahí el interés de este libro, que reúne una veintena de trabajos agrupados en tres apartados: economía política, análisis y reformas. En el primer apartado se incluyen ensayos sobre el liberalismo y sobre historia del pensamiento económico, una disciplina que el autor defiende como ingrediente básico del análisis económico. Su maestría a la hora de abordar estos problemas pueden verse
Este libro es recomendable por tres razones. Primero, se acerca la famosa cita de Maastricht y es momento de hacer balance de lo que ha representado el pasado y de tragar saliva y prepararse para lo que vendrá. Segundo, el libro es un buen trabajo profesional y casi todos los problemas económicos que nos acosan están aquí reflejados. Tercero, Carmela Martín, catedrática de Economía Aplicada en la Complutense, ha escrito un libro «económicamente correcto», que recopila la mainstream economics, especialmente en España y Europa. Sólo quedamos fuera los comunistas teratológicos y los liberales marginales, los únicos que, por motivos –¡vive Dios!– bien distintos, seguimos planteando recelos frente al «sueño de la razón» de la Unión Económica y Monetaria. Politics makes
Probablemente, el que se publiquen en España en un solo año cuatro libros de cualquier autor ya sería motivo de asombro. Si resulta que ese autor es Friedrich A. Hayek (1899-1992), ello obliga a añadir la admiración a la sorpresa, y a dar la enhorabuena a José Antonio Aguirre, que ha cuidado la edición española de las dos primeras obras, y al profesor Jesús Huerta de Soto, que se ha ocupado de las otras dos. Líder de la Escuela Austríaca y Premio Nobel, Hayek fue uno de los grandes economistas del siglo XX , pero el triunfo del keynesianismo oscureció su labor durante décadas. De hecho, Hayek prácticamente abandonó sus estudios de teoría económica y cuando recibió en 1974 el
Desde 1996 nuestro propósito es transmitir, a través del comentario bibliográfico, opinión cultural de altura a un público lector, muy formado y con intereses más amplios que los correspondientes a su especialidad.