
Jovellanos, político
En 1812, un año después de la muerte de Jovellanos, el geógrafo y político liberal Isidoro de Antillón publicó la que podríamos considerar primera biografía del asturiano. A esta obra siguió dos años más tarde Memorias para la vida del Excmo. Sr. D. Gaspar M. de Jovellanos, del afrancesado Ceán Bermúdez, uno de sus amigos íntimos desde la infancia. No deja de ser significativo que los primeros relatos sobre la vida de Jovellanos se debieran a un liberal, diputado en Cádiz, y a un notorio afrancesado. Sobre el personaje siguió escribiéndose en el siglo XIX, pero el paso decisivo para conocerlo lo dio Julio Somoza a finales de esa centuria. Somoza ofreció abundantes noticias sobre la vida y la obra del ilustre asturiano en varias publicaciones que constituyen hoy la fuente de muchos de los escritos sobre él. De entonces acá, han ido apareciendo paulatinamente biografías y estudios, entre los que destacan, ya en la centuria actual, la obra monumental de Manuel Álvarez-Valdés, llena de informaciones de primera mano sobre la trayectoria de su paisano, y los estudios preliminares a las Obras Completas de Jovellanos, el magno proyecto iniciado en los años ochenta del siglo pasado por José Miguel Caso González y continuado hasta nuestros días por relevantes especialistas en el siglo XVIII.