De Asakusa a Shibuya
El pasado 16 de mayo fue un día de fiesta mayor en Asakusa y a punto estuve de perdérmela. No me faltaba información; pura y simplemente, me había hecho olvidarla la fatiga y cuando me acordé casi no llegaba. Al final de esta última estancia en Tokio estaba rendido. Tengo la manía de que las ciudades, para conocerlas, hay que pateárselas.