Sexo sin derecho: las lecciones de Martha Nussbaum
A principios del año 2016, y a propósito de la imputación por agresión sexual del actor Bill Cosby, la conocida filósofa Martha C. Nussbaum, premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales (2012) y una de las más prolíficas e influyentes pensadoras contemporáneas, se descolgaba con un artículo en The Huffington Post en el que rememoraba un desagradable episodio de su juventud. En los siguientes términos: «En el invierno de 1968, cuando era una emprendedora joven de veinte años, tuve un enorme flechazo con un actor conocido que pronto se convirtió en otro de esos idolatrados papás de la televisión americana. Era verdaderamente un buen actor y en aquella época representaba un papel importante en la escena teatral neoyorquina. Tenía alrededor de cuarenta años. Tras salir un par de veces con él una noche le pedí que me llevara a mi apartamento. Tenía alguna experiencia sexual, pero no mucha; sin embargo, decidí ser lanzada pues nos encontrábamos a finales de los años sesenta y sentía que debía sumarme a la cultura imperante. A diferencia de las mujeres agredidas por Cosby, ciertamente yo quería acostarme con él. A lo que no consentí fue al repugnante, violento y doloroso abuso que él se permitió conmigo. Recuerdo gritar pidiendo ayuda, sin resultado, y a él diciendo: “Es parte del sexo”».