Horticultura
Tranquilos, que todo se va a arreglar. Arrimando el hombro, y entre todos, saldremos también de ésta, como ya hicimos antaño. Somos un pueblo magnífico, puesto a prueba y endurecido tantas veces en el crisol de la historia que hemos desarrollado abundante músculo moral para combatir la adversidad. Miremos a nuestro alrededor: en el fondo no pasa nada, pura contingencia. Un poco de sindéresis, un tiempo de apretar dientes y trabajar duro, y volverán los días luminosos y el radiante porvenir.