No culpen a las ratas
Leída la Introducción de esta obra, y comprobada su fecha de edición (2019), cae de cajón que la elección de semejante asunto por parte de la autora ha sido por entero ajena al escenario que poco después sumiría al planeta en una catástrofe que tal vez pueda alcanzar, o incluso superar, la Segunda Pandemia que entre 1346 y 1352 sembró la muerte y hundió la economía de Eurasia en un marasmo de categoría inédita. Entremedias hubo desde luego otras varias, y ésta que aquí se trata, la que castigó a la Península Ibérica entre 1596 y 1601, si no alcanzó tamaña magnitud, lo hizo también con los Países Bajos, Picardía, Bretaña, Normandía, para descender luego hacia la costa mediterránea y penetrar por el este hasta Turín.