
Herir en lo vivo
No veo demasiada afinidad entre los narradores españoles del siglo XIX y sus colegas de hoy, que prefieren a los maestros antiguos angloamericanos, además de algún francés o algún ruso: más común parece que citemos como punto de referencia literario a Henry James que a Benito Pérez Galdós, los dos nacidos en 1843. Quizá resulte incómodo leer hoy a los realistas y naturalistas de aquí, y volver a sus mundos de fondo feo y aún cercano, como si pudiera más la realidad intolerable que el talento literario.