BRUCE CHATWIN. Anatomía de la inquietud
A Bruce Chatwin se le comprende bien como un resultado de la cultura británica, capaz de producir esos inquietos aventureros y exploradores que, desde Cook hasta Hillary, se llamaron Livingstone, Stanley, Speke, Grant, Burton o Lawrence, o esos viajeros curiosos como Sterne, Borrow, Stevenson o Brenan, que dejaron anotados sus vagabundeos y sus exilios en páginas tan hermosas como certeras. Además, Chatwin fue un viajero de ahora mismo, del último cuarto del siglo XX , y a su amplia y sólida formación literaria se debe añadir el equipaje de unas seguridades científicas, en lo biológico y en lo etnográfico, de que sus predecesores carecían. Esta cultura científica le permitió, al profundizar en asuntos casi secretos para la mayoría, conseguir una