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«No soy lo bastante Goethe»

Hallazgos para no lectores

GÜNTER GRASS

Círculo de Lectores, Madrid, 1997

Trad. de Miguel Sáenz

240 págs.

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117 acuarelas, 131 poemas breves, brevísimos, algunos casi casi telegráficos, componen el último libro de Günter Grass al hilo de sus setenta años. Acuarelas donde el texto de los poemas forma parte de las mismas, escrito con el propio pincel y a veces hasta con el mismo color dominante en la acuarela, de tal modo que al final cabe preguntarse si no ha sido también a veces la escritura del poema, con el pincel, lo que hizo surgir la acuarela a partir de las palabras. La morfología del resultado descarta semejante hipótesis, pero la simbiosis es desde luego fulminante. Así por ejemplo, en «Breve homilía dominical» Dios –según Nietzsche– está muerto, / pero, como arma de usos múltiples, / sigue siendo operativo / Y, al no estar protegido por patentes / es comercializado en todo el mundo, el texto aparece escrito dentro de unas nubes grises de rebordes blancos algodonosos: es casi el humo de la zarza ardiente, y el poema, en sí, como una suave burla del mismo Dios.

Günter Grass comenzó su carrera artística como escultor, como gráfico y como poeta, que son las actividades suyas menos conocidas en el ámbito del idioma español (y no sólo en él), y ciertamente como poeta es uno de los mejores de la posguerra alemana. Baste recordar su inclusión en la formidable antología-hito 21 poetas alemanes (1980), del malogrado Felipe Boso, y baste recordar la selección Poemas (1994), de su traductor de cabecera, Miguel Sáenz, ambos volúmenes editados por la colección Visor.

Si bien es verdad que la fama universal se la proporcionaron sus novelas, Günter Grass ha seguido manteniendo en paralelo tres talleres de creación personal: el de escritura, el de obra gráfica y pintura, y el de cerámica. De dos de ellos nos llegan ahora estos Hallazgos (en el sentido de «objetos perdidos») para gente que no lee, convertidos en la versión española, por mor de la diagramación, en Hallazgos para no lectores. La edición alemana original, la que manejo al escribir estas líneas, es un volumen de gran formato y con una reproducción óptima, que ya como simple objeto resulta deslumbrante. Se notan la mano paternal y el buen ojo del artesano Grass cuidando la edición.

El tono que preside los poemas (y bastantes de las acuarelas) si no otoñal, como apunta buena parte de la crítica alemana, sí tiene mucho de veranillo de San Martín. No es el otoño de un patriarca lo que aquí se expresa, a pesar de la dedicatoria: «A mis nietos, en número creciente». Pero sí la voz de un hombre que ha alcanzado mentalmente indemne una edad avanzada y que acaba de salir de un grave trance de salud. Con todo, el humor y hasta el sarcasmo surgen a cada momento en estas coplas septentrionales: así cuando habla de una «papilla petrificada» que desde hace años pesa sobre su país, ni con elecciones ha habido manera de sacársela de encima. Y no sólo el humor y hasta el sarcasmo: en el hermoso poema que dedica a las chumberas (posiblemente en el jardín de su casa del Algarve). Grass se autodefine como «el jardinero para plantas que se conforman con poca agua», y se despide de ellas con una tierna ironía: «Por favor, sed moderadas: ¡multiplicaos!». Una tierna ironía que no vacila en autoaplicarse cuando concluye el poema Desde los tiempos de Grimm afirmando: «Pero para él no soy Goethe suficiente».

Miguel Sáenz finalizaba el prólogo de Poemas rogando al lector con insistencia que aprendiese alemán para poder leer a creadores tan intraducibles como Günter Grass. No dispongo de su traducción de estos Hallazgos… en el momento de pergeñar esta nota, pero tratándose de él la calidad está garantizada ab initio. Lo cierto, empero, es que cada poema de este libro conlleva un desafío a la inventiva del traductor, y no resiste la tentación de citar mi variación del titulado Del uso de los artículos, donde Grass consigue visualizar de mano maestra los tres del singular del alemán (Der, Die, Das) construyendo al mismo tiempo una frase redonda: El bosque / La amenaza en / Lo más hondo.

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Ficha técnica

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