Buscar

La recuperación de un escritor

Obras

MAURICIO BAARISSE

Fundación Santander Central Hispano, Madrid

Selección y prólogo de Jordi Gracia

415 págs.

18 €

image_pdfCrear PDF de este artículo.

La colección «Obra fundamental» de la Fundación Santander Central Hispano ha incorporado a sus estudios las Obras de Mauricio Bacarisse. La elección de este autor no puede ser más acertada, al menos para mí, que he dedicado a este empeño una buena parte de mi tiempo durante los últimos veinte años. Se trata de un autor de la época de las vanguardias del que pude leer algo durante mis estudios, y que luego despertó a mi interés como objeto de mi tesis doctoral. Es un autor olvidado injustamente por la crítica, como tantas veces hemos recordado, y que ofrece varios puntos de interés necesarios para reconstruir cabalmente la historia literaria del siglo XX. El volumen que ofrece la Fundación Santander Central Hispano no es la obra completa del autor, sino una selección de lo más significativo de la producción de Bacarisse con inclusión de verso, prosa, artículos y traducciones, precedidos de un estudio de mediana extensión y una sucinta bibliografía de y sobre Bacarisse. Iremos por partes, comentando esta edición tan necesaria y oportuna.

La primera impresión que nos ofrece el conjunto es positiva. No en vano se ha encomendado a la labor crítica del profesor de la Universidad de Barcelona Jordi Gracia, más conocido por sus trabajos sobre la historia intelectual durante el franquismo, como el que ha aparecido recientemente, La resistencia silenciosa, Premio Anagrama de ensayo de este año.

El comentario crítico biográfico inicial, presentado bajo el título «Mauricio Bacarisse o el arte de la reticencia», ofrece al lector una semblanza ajustada de la vida y la obra de Bacarisse. El conjunto de la información no resulta escaso, aunque para ello el autor se vea obligado a allegar de aquí y de allá todo el conjunto de datos que laboriosamente hemos ido recopilando los investigadores que, partiendo de casi nada, nos vimos obligados a escribir las primeras páginas sobre este autor. Jordi Gracia ha puesto un orden a su desarrollo en el que piezas ya conocidas se han ido colocando en distintos lugares, pero el resultado casi es el mismo. No se aclara en este trabajo si Bacarisse recibió el Premio Nacional de Literatura antes o después de su muerte, aspecto en el que se ha insistido, aunque, en verdad, el asunto no tenga ya demasiada importancia. Yo prefiero atenerme, por ahora, a la información que ofrece El Debate el día 5 de febrero de 1931, en la que se reconoce que «la decisión de conceder el premio a Bacarisse estaba tomada por el jurado desde finales de diciembre», es decir, días antes de que Bacarisse cayese enfermo, y un mes antes de que tuviese que ser ingresado en la Clínica Villa Luz para ser operado in extremis. Es muy posible que la enfermedad del poeta, y la muerte de su padre unos días antes, retrasase no tanto la concesión cuanto la difusión pública del premio, que, como es sabido, ese año se difirió de forma insólita.

Por lo que se refiere a la antología poética, el profesor Gracia recoge una amplia selección de poemas del primer libro, una mucho más limitada del segundo poemario de inferior calidad, además del De Profundis completo, y una docena de poemas de los cuarenta y cinco que incluye, espigados del último libro de versos. En este sentido, el responsable de la edición sigue la mismas pautas que adoptó en su época la crítica. Naturalmente, El esfuerzo fue un libro rompedor y sorprendente que la crítica saludó con esperanza. De los treinta y un poemas del libro, se recopilan veintiuno, de los cuales los nueve pertenecientes a la parte titulada «La Miseria» se reproducen completos. Ciertamente, esta segunda parte resultó chocante a los comentaristas literarios del libro, pues, como señaló después Johannes Lechner, esta colección de poemas constituyó la primera manifestación notable de la poesía social española del siglo XX.

De El paraíso desdeñado, segunda entrega de Bacarisse y el libro menos afortunado de los tres, se recogen media docena de poemas de los diecisiete de la primera parte, pero se reproduce íntegro el De profundis, que ocupa la segunda parte del libro con doscientos versos agrupados en cincuenta cuartetos. Tanto los poemas sueltos como el largo De profundis siguen la edición que yo mismo hice en su día de la Poesía completa de este autor publicada en la Editorial Anthropos.

Con respecto al tercer y último libro de Bacarisse, Mitos, el profesor Gracia presenta, además de la «Dedicatoria» a Valle-Inclán, una selección de doce poemas seleccionados de las diversas partes del libro a gusto del antólogo. Esta selección se me antoja ligeramente corta, dadas las tendencias y estilos de este libro. Pienso que el lector hubiese agradecido la inclusión de «Salambo», «La bañista», «Mármol», o un par de décimas más como «Cisne» y «Perejil, fina hierba», por ejemplo. En todo caso, la selección de poemas presenta de modo suficiente la evolución que el poeta va experimentando a lo largo de los quince años que duró su actividad poética.

La otra vertiente literaria de la que nos da cumplida cuenta esta edición es la prosa. En efecto, la sola reedición de Los terribles amores de Agliberto y Celedonia ya constituye un mérito importante, por más que la edición pirata de la editorial Mestral Libros en 1989 pusiera una reedición del texto a disposición de los interesados. Sólo me queda la insatisfacción de que ni entonces ni ahora han consultado el manuscrito original que obra en mi poder, y que hubiese puesto a disposición de quien me lo hubiese solicitado. La consulta del manuscrito original hubiese aclarado algunos términos, como es el caso de la palabra pule que figura al comienzo de la novela, página 128 de esta edición, en lugar de puzzle, por una falsa lectura transmitida desde la primera edición.

Por último, y antes de pasar a la bibliografía, que también merece unas palabras, es necesario detenerse en la colección de artículos que el editor decide reproducir para ofrecer el pensamiento de Bacarisse en los aspectos teóricos más importantes relacionados con las vanguardias y sus protagonistas. Gracia recoge seis artículos de la revista España, dos de la Revista de Occidente y la necrología de Fernando Villalón que publicó La Gaceta Literaria, amén de unas traducciones de Mallarmé.

Es conocido que ya desde 1914 Bacarisse empezó a colaborar en revistas y periódicos de diversa entidad con versos, prosas, crítica de libros y comentarios de actualidad. De las ochenta colaboraciones que yo tengo registradas, no menos de veinticuatro se publicaron en la revista España. Las primeras eran poemas que aparecían espaciados en el tiempo. Desde julio de 1920, fecha en que aparece el artículo «Afirmaciones futuristas», hasta febrero de 1921, con la publicación de «Otra vez Herrera y Reissig», España publica dieciséis trabajos de Bacarisse, siete de los cuales están recogidos por Gracia en la antología que comentamos. Entre noviembre de 1923 y diciembre de 1926, las colaboraciones de nuestro autor se reparten entre la Revista de Occidente (seis) y la revista Alfar (cinco), amén de otras colaboraciones sueltas. De todas ellas, Gracia recoge dos de la Revista de Occidente: «El silencio por Mallarmé», respuesta a la encuesta de la revista sobre los cinco minutos de silencio en el Jardín Botánico, comentario curioso más que interesante, y la reflexión sobre el ingreso en la Academia de Eduardo Gómez Baquero, Andrenio, autor de Cartas a Amaranta. Los dos últimos trabajos están tomados de La Gaceta Literaria, en cuya órbita entró Bacarisse después de enfadarse con Fernando Vela y abandonar la Revista de Occidente. De las cinco aportaciones a esta revista, las dos que selecciona el antólogo son una sentida nota necrológica con motivo de la muerte del amigo de última hora, el sevillano Fernando Villalón, y la respuesta de Bacarisse a la encuesta de Pérez Ferrero sobre las vanguardias. Estimo que los artículos seleccionados por el profesor Gracia responden bien al objeto de su publicación, pero yo hubiese incluido, además, otros dos trabajos que considero complementarios de los ya señalados. Primero, las reflexiones del joven poeta recogidas en el artículo «Meditaciones de abril», publicado en Cervantes en abril de 1919, en el que se manifiestan las impetuosas convicciones del poeta en aquel momento, y, por otro lado, la reseña crítica al libro recién aparecido de Torre Literatura española de vanguardia, que se publicó en Plural, en junio de 1925, con el título «Guillermo de Torre, historiador de la Literatura». Este conjunto de trabajos creo que ofrece al interesado una cabal visión de lo que fue Bacarisse como crítico y teórico de la literatura.

Se cierra este volumen con tres traducciones de otros tantos poemas de Mallarmé que, supongo, quieren ser un testimonio de la labor de traducción que también realizó Bacarisse. En efecto, se reproducen tres poemas ya recogidos en Los poetas malditos, de Verlaine, traducido por Bacarisse y publicado por Mundo Latino en 1921. El primer texto, «El mal sino», título y texto están transcritos de la edición de Los poetas malditos señalada. El segundo poema se titula «Instancia», pero la antología del profesor Gracia que comentamos lo titula «Nombramiento» y la traducción que ofrece nada tiene que ver con la realizada por Bacarisse. El tercer texto se titula «Esta noche», pero la antología pone como título el primer verso en francés del poema: «Quand l'ombre menaça de la fatale loi…» La traducción es, sin embargo, la de Bacarisse. Estos desajustes indican que las fuentes del antólogo en estas traducciones han sufrido errores de diverso tipo o no han sido consultadas adecuadamente.

Por último, me gustaría hacer una referencia a la bibliografía sucinta que nos ofrece el profesor Gracia. Es evidente que el interés de la crítica por Bacarisse ha sido más bien limitado y que, por tanto, su bibliografía no resulta abundante; pero sí es cierto que hemos sido varios los que hemos intentado promover el conocimiento de este poeta y novelista, y rescatar de ese olvido feroz en el que a veces caen los escritores la contribución de Mauricio Bacarisse. En este sentido, tenemos que decir que la bibliografía que recoge Gracia no olvida nada fundamental de lo que se ha escrito sobre este autor. Solamente me gustaría hacer hincapié en un par de artículos que ha omitido, pero que en su día abrieron caminos de estudio, como son las páginas que Johannes Lechner dedicó a Bacarisse en su El compromiso de la poesía española en el siglo XX, de 1968, o el trabajo que Manuel Ruiz Lagos le dedicó en Anales de Estudios Madrileños, de 1972, págs. 439-453.

En cualquier caso, saludamos la oportuna edición de este volumen, que contribuirá a un mejor conocimiento de este poeta y novelista que, si no marcó un hito en la historia literaria española, sí contribuyó con su granito de arena a convertir en floreciente un período fértil de la creación literaria.

image_pdfCrear PDF de este artículo.

Ficha técnica

6 '
0

Compartir

También de interés.

Naguib Mahfuz: un proyecto narrativo de envergadura